¿Sabías que tu computadora puede tener accesos ocultos? Se llaman backdoors y si se usan con fines maliciosos, los cibercriminales pueden acceder a tu dispositivo y toda la información, archivos y datos guardados en ella. ¿Da miedo, verdad? ¡Sigue leyendo para que te enteres cómo pueden espiarte y las alternativas que tienes para protegerte de esta brecha de seguridad!
¿Qué es el backdoor y cómo funciona?
El backdoor es un elemento casi imperceptible de los malwares que identifica los puntos vulnerables de acceso en un dispositivo y le da control parcial o total a otras personas para que hagan lo que quieran con él.
Cuando tienen fines maliciosos, estas “puertas traseras” se descargan junto a programas y apps infectadas por un virus para que un tercero use tu equipo como si estuviera sentado frente a él.
En el mundo del cibercrimen, los backdoors se usan como arma para cometer delitos como:
- Reclutar el equipo en su botnet y colapsar páginas web, contaminar a otros dispositivos con virus o enviar spam desde el correo electrónico de la víctima.
- Manipular su información, para enviar, descargar, recibir y borrar cualquier archivo en el equipo.
- Extorsionar a la víctima a cambio de no publicar fotografías o información privada.
- Robar su dinero, ya que los ciberdelincuentes podrían acceder a su cuenta bancaria y dejarla sin un centavo.
Para entrar en el equipo usarán técnicas de ingeniería social como el phishing, actualizaciones de seguridad falsas y/o anuncios publicitarios engañosos (adware).
¿El backdoor es lo mismo que un troyano?
¡No necesariamente! Los troyanos son un tipo de malware que incluye funciones de backdoor. No son sinónimos porque las puertas traseras pueden venir instaladas en un programa en el que los desarrolladores las dejaron para hacer actualizaciones y mejoras o porque olvidaron cerrarlas.
El backdoor es una entrada secreta que casi nadie conoce y el troyano es un malware que se “disfraza” de otro programa para entrar en tu computadora.
Las puertas traseras no siempre son peligrosas
Aunque en este post nos enfocamos en sus usos maliciosos, es importante que sepas que un backdoor no siempre es malo; de hecho, los “accesos secretos” tienen usos completamente legales como:
- Actualizar programas para que el usuario no tenga que hacerlo.
- Dar mantenimiento a un software o al sistema.
- Resolver incidencias y dar asistencia técnica para resolver problemas de manera remota.
- Prevenir delitos ayudando a las autoridades a monitorear y evitar, por ejemplo, ataques terroristas.
Curiosidades
¡Los backdoors son más antiguos de lo que te imaginas! En 1984, el Ken Thompson Hack fue el primer intento de instalar virus y backdoor en una computadora.
¿Cómo saber si tu computadora tiene una puerta trasera?
Los backdoors son difíciles de detectar porque sus síntomas son los mismos que los de un virus. Estas son algunas señales que podrían delatar la presencia de alguien más en tu equipo.
- Tu computadora tiene problemas de rendimiento.
- La velocidad de navegación en internet es más lenta de lo normal.
- Aparecen cuadros de diálogo para actualizar información o ingresar contraseñas.
- Se abren ventanas emergentes en tu computadora.
Cinco consejos para evitar un backdoor
Si mantienes las puertas de casa cerradas por tu seguridad, entonces ¿por qué no las de tu computadora? Al igual que con otras amenazas cibernéticas, proteger tu información privada depende de ti. Sigue estos consejos para evitar que los ciberdelincuentes entren a tu equipo para hacer sus fechorías:
- Mantén tu equipo al día: evita este y otros tipos de ataques instalando la última versión del sistema operativo de tu dispositivo.
- Presta atención en dónde das clic: asegúrate de la autenticidad de los e-mails y ofertas que recibes. Si te ofrecen cosas demasiado buenas para ser verdad o recibes correos en donde te piden datos, te intentan amenazar o te advierten que tu cuenta será bloqueada o suspendida ¡cuidado!
- Descarga siempre desde sitios oficiales: instala programas o apps desde tiendas y páginas web autorizadas para evitar softwares maliciosos.
- Evita el jailbreak: no esquives las medidas de seguridad de tu dispositivo y procura mantener su configuración original.
- Protégete con antivirus y firewalls: estos programas se encargan de detectar y eliminar todo tipo de malware.
¡Cierra las puertas que tú no hayas abierto!