Método de las 12 monotareas para mejorar tu productividad y satisfacción. ¡Adiós multitareas!

Tiempo de lectura: 5 min
Redacción Banco Pichincha
30 de mayo 2022

Con la vida tan ajetreada que llevamos nos hemos acostumbrado a hacer más de una cosa a la vez. Y ser multitarea nos ha parecido, hasta ahora, una razón por la cual sentirnos orgullosos e increíblemente productivos. Sin embargo, a la larga, el multitasking también ha traído consigo algunas consecuencias no tan positivas como esperábamos. Así que, ¿qué te parecería volver a hacer una sola tarea a la vez? En este post nos ocuparemos de explicarte todo sobre el método de las 12 monotareas para mejorar tu productividad y tu calidad de vida.

¿Por qué deberías dejar de ser multitareas?

El concepto de multitarea nació en 1965, cuando la empresa IBM lanzó un sistema de computación que, por primera vez, podía cumplir con varias operaciones a la vez. Y ya que has caído en cuenta, parecernos a una computadora no suena tan halagador considerando que los humanos somos más inteligentes que un aparato inventado por nosotros mismos.

Sin embargo, aunque fuera nuestro deseo, el cerebro humano no está preparado para más de una tarea a la vez, aun cuando así parezca. Esto ha sido comprobado con múltiples estudios psicológicos y psiquiátricos desde hace cinco décadas. Un estudio de la Universidad de Stanford, entre otras, han detectado importantes consecuencias negativas de tratar de ser multitareas:

  1. Disminución considerable de la capacidad de concentración.
  2. Aumento de la distracción.
  3. Disminución de la memoria.
  4. Bloqueo mental.
  5. Pérdida de tiempo.
  6. Disminución de la productividad.
  7. Poca retención de la información.
  8. Síndrome de burnout o estrés laboral.
  9. Mayor cabida para el error.
  10. Disminución de la calidad del trabajo.

El retorno a la monotarea 

El método de las 12 monotareas es un libro publicado por el autor y editor estadounidense Thatcher Wine, en 2021, en el contexto del Covid-19. En él explica cómo la tecnología y las rutinas diarias, laborales y personales, nos han obligado a ser algo que no podemos ser: multitareas.  

En la búsqueda de una solución, el autor plantea volver entrenarnos en el difícil ejercicio de hacer una sola tarea a la vez. Para ello, él ofrece 12 tareas y de la vida diaria con las cuales se puede empezar:  

Leer Leer: escoge un libro en papel y comienza tu lectura, totalmente desconectado de la tecnología. Concéntrate en la historia y no dirijas tus pensamientos a nada más.
Caminar Caminar: esta actividad no es el medio para un fin, sino un fin en sí mismo. Esto quiere decir que no camines pensando en llegar a algún lugar sino más bien en centrar tu atención y tus sentidos en lo que te rodea, como olores, texturas, colores, etc.
Escuchar Escuchar: quizá es una de las tareas más complicadas. Escuchar con atención real te permite conectar mucho mejor con otras personas y desarrollar tu cerebro. Cuando entables conversación con alguien, evita usar tu celular o divagar en otros pensamientos.
Dormir Dormir: concéntrate en descansar adecuadamente, eliminando las distracciones previas, sobre todo las pantallas. Dormir es esencial para que el cuerpo se regenere y, entre otras cosas, evitar trastornos del sueño.
Comer Comer: esta es una actividad a la que se le da muy poca importancia y puede resultar complicado no hacer nada más mientras comes. Intenta concentrarte en los sabores y reflexionar sobre cómo han llegado esos alimentos hasta tu plato.
Desplazarse Desplazarse: los desplazamientos se suelen usar para organizar tareas, hacerlas o pensar en los pendientes a futuro. Escoge un sitio al que quieras ir y trata de disfrutar del trayecto sin enfocarte en otro momento más que en el presente.
Aprender Aprender: esta es una de las tareas más estimulantes para el cerebro. Sin embargo, para mejorar la concentración y la asimilación de conocimientos, deberías enfocarte solo en esta tarea.
Enseñar Enseñar: esta actividad también nos permite crear relaciones más estrechas y de mejor calidad con los demás. Enseñar algo a alguien requiere de mucha concentración y te ayuda a identificar las propias limitaciones de tu conocimiento y mejorarlo.
Jugar Jugar: lastimosamente, esta actividad se ha limitado únicamente para los niños. Jugar implica quitarse la presión y la gran concentración dedicada a otras tareas más serias. Tu reto al jugar es soltar la presión que llevas bajo tus hombros al sentir que no estás siendo productivo o no estás monetizando.
Mirar Mirar: practica la observación al detalle, desde lo más cercano a ti hasta lo más lejano. Deja de lado el lente de la cámara y utiliza tus ojos para detectar cada pequeña característica de lo que estás observando.
Crear Crear: constantemente estamos creando, aunque no nos demos cuenta. Desde cosas pequeñas como un mensaje de texto hasta algo más grande como un emprendimiento. Crea algo nuevo y concéntrate en todas las posibilidades que tienes para hacerlo. ¡Ya verás qué mágico es hacerlo!
Pensar Pensar: todo el tiempo rondan pensamientos en la cabeza, pero, así como vienen, se van, sin mayor importancia. Esta vez dedícale tiempo a pensar, como una monotarea, y te darás cuenta de que parte del trabajo cognitivo lo hemos delegado a nuestros dispositivos electrónicos, sobre todo al celular.

 

Aunque parezcan tareas fáciles y de la vida diaria, ya verás que, al intentarlo, te resultará un tanto complicado, precisamente por nuestra intención constante de ser multitarea. Thatcher Wine recomienda empezar por la primera tarea y dedicarle el tiempo que se considere prudente, puede ser una semana, un mes, etc. Idealmente, no pases a la siguiente hasta que sientas que ya la controlas bastante bien. Continúa haciendo vida normal y ve incorporando la monotarea a otras pequeñas o grandes tareas. ¡Ya verás que te sentirás mucho más productivo, concentrado y, sobre todo, feliz y satisfecho!  

 

PRO TIP: evita el círculo vicioso de la procrastinación porque la carga mental y los sentimientos negativos como resultado de postergar pueden ser agobiantes y provocar que procrastines todavía más.