Los avances, el acceso a la tecnología y la coyuntura mundial han provocado un cambio rotundo en la manera en que consumimos. El upskilling y reskilling nacen con la necesidad que tienen las empresas de adaptar su talento humano para satisfacer un mercado que evoluciona a pasos agigantados.
Hoy existen puestos de trabajo que hace algunos años ni siquiera existían, pero gracias a las exigencias de la transformación digital se han convertido en imprescindibles para que las empresas sigan siendo relevantes para sus consumidores. Se trata de profesiones relacionadas con el marketing digital y comercio electrónico, la inteligencia artificial, el Big Data o el internet de las cosas.
El problema es que el mercado laboral no tiene suficientes expertos y es ahí donde entran las estrategias de upskilling y reskilling en las organizaciones: los actuales colaboradores necesitan aprender y reaprender nuevas aptitudes.