El término ahorro proviene del árabe hurr que significa "libre" y desde la Edad Media evolucionó hasta convertirse en el verbo ahorrar. Al inicio, se utilizaba para referirse a la libertad conseguida por un esclavo, que luego pasó a significar que alguien se liberaba de una carga. ¡He ahí la clave! Pero sigue leyendo este post porque vamos a explicarte todo lo que tienes que saber sobre el tema.
El ahorro es una porción de los ingresos mensuales que no se destina al consumo, es decir, que no se gasta. Este dinero se reserva para poder contar con él en el futuro. Una vez que se ha guardado el dinero suficiente, se puede utilizar para cumplir múltiples objetivos personales o familiares que mejoren tu calidad de vida y, si es el caso, también la de tu familia. ¡Ahorrar es postergar la recompensa en pro de algo mejor y más grande! Te permite construir un patrimonio y es, también, en sí mismo parte de este.