El keylogger o “registrador de teclas” es un software de vigilancia que registra las pulsaciones del teclado de una computadora o dispositivo móvil sin que el usuario se entere. Este malware es utilizado por los ciberdelincuentes para espiar a sus víctimas y robar credenciales, datos confidenciales, historial de navegación e incluso números de tarjetas.
Al acceder a la actividad de un dispositivo, los atacantes pueden robar el dinero de las cuentas bancarias de la víctima, suplantar su identidad e incluso extorsionarla para reclamar una recompensa a cambio de información sensible.